El Test de Cubos del WISC-IV mide la percepción visual, la capacidad de establecer relaciones espaciales y la coordinación visomotriz. Es una prueba estandarizada que frecuentemente también aplican en niños con NEE.
El niño dispone de 9 cubos para realizar diversos diseños. Estos cubos tienen colores en sus 6 caras, unas son rojas, otras blancas y otras mitad rojas y mitad blancas.
Al principio se presenta un modelo real que construimos delante del niño y que él debe reproducir. Posteriormente, el niño tendrá que componer diseños que aparecen dibujados en unas láminas, siempre dentro de un tiempo límite, existiendo en los items más avanzados bonificación por acabar antes del tiempo señalado. Lo que siempre me he preguntado es: ¿Se adecúa el límite de tiempo a las características físicas de cada niño? No tardará lo mismo un niño con las habilidades motrices completas, que un niño con tetraplejia y/o espasticidad; independientemente de su inteligencia.
Esta tarea requiere capacidad de visualización espacial, tanto a la hora de percibir los diseños-modelo, como de reproducirlos. Una planificación general de la tarea produce mejor resultado que una actividad de tanteo y ensayo-error.
Al tratarse de una prueba no verbal puede perfectamente aplicarse a sujetos con afasias. Pero… ¿existe algún parámetro qué tenga en cuenta la disgregación entre habilidades cognitivas y motoras que presentan algunos niños con discapacidad física?
Dejo la pregunta en el aire…
Por esa razón, no se debe atribuir el bajo desempeño en un test cognitivo a una baja capacidad intelectual, cuando éste pueda ser causa de discapacidades motoras o sensoriales.
Antes de examinar a un niño con discapacidad física, se debe familiarizar con sus limitaciones y con su manera preferida de comunicación. Por lo que para estimar la capacidad de los niños con discapacidades físicas deben usarse otros test especiales, que complementen en WISC.
Bibliografía consultada:
Manual Wisc 20141 en: http://es.scribd.com/doc/67951018/Manual-Wisc-20141